Las cinco especificaciones Caval que existen actualmente no son productos estáticos, requieren de revisión y actualización frecuente. Tras una primera definición de base más o menos teórica, es su uso el que permite detectar carencias o requisitos derivados de nuevos usos o reglas de negocio. Es por ello que ha sido necesario establecer un protocolo de actualización práctico y riguroso.
La edición de ficheros tan complejos como los utilizados en Caval en la descripción de los WSDLs (por ejemplo ChannelManagerService.wsdl) requiere de mucha atención, por lo que hemos decidido acometer cambios en sesiones conjuntas, dónde como mínimo dos personas de turisLab conocedoras de la especificación aplican y revisan conjuntamente la edición.
Para no bombardear a usuarios con nuevas versiones cada vez que se apruebe un cambio menor, cualquier petición de modificación queda registrada hasta que se acumule un número suficiente de cambios como para justificar una nueva versión. Los cambios considerados mayores o de necesidad se aplican inmediatamente para no afectar o limitar al uso que pueda darse en empresas.
Mencionar también que se ha ideado un mecanismo de trazabilidad para facilitar el seguimiento de las versiones por parte de sus usuarios. Todo WSDL incorpora en su cabecera la fecha de la versión actual y el histórico de versiones. Comprobando la fecha del que tenemos en un momento dado y siguiendo los archivos de control de versiones (p.ej. ChannelManagerService_ChangeControl.txt) sabrá que actualizaciones se han realizado entre una y otra. Ponerse al día de esta forma no debiera ser muy traumático.