Jesús Ginard (Artá, 1987) es el fundador de Wavesfactory, una empresa enfocada en el desarrollo de instrumentos virtuales y plug-ins de audio para la composición y producción musical.
Músico por genética, informático por vocación y con estudios de comunicación audiovisual. Funda Wavesfactory en 2010, actualmente ubicada en el Viver d’Empreses d’Artà.
Nominado a los premios SOS Magazine en la categoría «mejor plug-in del año» por Trackspacer y ganador en la categoría «Best upcoming sample developer» en los premios The Audio Spotlight.
1- Jesús, ¿nos puedes contar como nació Wavesfactory y qué te llevó a crear esta empresa, el porqué de este producto?
La idea de la empresa nació en 2009 cuando trabajaba como compositor musical para programas de televisión y documentales. Para mi trabajo necesitaba librerías de instrumentos a diario y me molestaba el hecho de tener que gastar una media de 100 euros en cada librería. Así que decidí crear una página en la que vender mis propias librerías a precios más bajos. El proceso natural me llevó a realizar mi primer plug-in llamado Trackspacer en 2012. Hoy en día tenemos 30 instrumentos virtuales y 4 plug-ins de audio en el mercado.
2- A día de hoy ¿cómo está posicionada Wavesfactory en el sector de la producción musical y de qué te sientes más orgulloso?
Wavesfactory compite en un nicho de mercado relativamente pequeño pero muy saturado. Como es natural, están los «big boys» que en el mercado de smartphones serían Apple o Samsung, y luego están las empresas pequeñas, entre las que me incluyo. Al ser productos digitales la cantidad de inversión necesaria, al no tener una amplia plantilla, es muy baja. Lo más importante es tener una buena idea. Lo que quiero decir es que un plug-in de audio de una empresa gigante no tiene por qué ser más bueno que el que pueda producir una sola persona con una buena idea y los conocimientos necesarios.
3- ¿Cuáles son los principales retos de Wavesfactory para este 2019?
Seguir desarrollando plug-ins innovadores y sobretodo ser más eficientes en cuanto al tiempo de desarrollo de un nuevo producto.
4- Ahora mismo ¿cuántas personas forman parte del equipo y cuáles son sus perfiles? ¿Donde están ubicadas? ¿Os gusta la etiqueta de “nómada digital” de cara al trabajo del futuro?
El 75% del trabajo en Wavesfactory lo realizo yo. El 25% restante se divide entre 3 personas y/o empresas especializadas de cada sector. En el sector DSP (Digital Signal Processing) trabajo con Ivan Cohen (@MusicalEntropy) basado en Francia, en temas de diseño trabajo con Voger Design basados en Ucrania y en temas de marketing trabajo con Socialtech basado en Inglaterra.
La etiqueta de «nómada digital» me gusta pero yo no me veo reflejado ya que no me quiero mover de donde estoy y en la definición parece que estés obligado a moverte.
5- ¿Como buscáis nuevos sonidos, a petición del mercado o se trata de adelantarse a las nuevas tendencias?
No me gusta seguir las modas. Me gusta mi trabajo porque sólo realizo productos o instrumentos que significan algo para mí. Si tuviera que basarme en modas me vería a mí mismo trabajando en algo que no me aporta nada a nivel personal y no disfrutaría de ir a trabajar. En cambio, Wavesfactory es una extensión de mis gustos en la que no realizo estudios de mercado y todo lo que se produce y sale a la luz es porque realmente me gusta. En el mundo del audio digital hay mucha tendencia a la nostalgia, en ese sentido yo me siento muy cómodo y me gusta traer de vuelta aparatos de los años 60 ó 70 en formato plug-in. Pero también me gusta desarrollar ideas nuevas en las que nadie ha trabajado antes, como Trackspacer. ¿A quién no le gustaría haber inventado el Auto-Tune?
6- ¿Qué software utilizáis? Hay una parte de I+D en vuestra empresa, ¿cómo se desarrolla? ¿Estáis trabajando con inteligencia artificial o Deep learning?
Los instrumentos virtuales están basados en Kontakt que es un sampler de la empresa alemana Native Instruments, con un lenguaje de programación propio llamado KSP (Kontakt Script Processing).
Para el desarrollo de plug-ins utilizamos C++ y el framework JUCE que es una maravilla.
De momento no hemos utilizado inteligencia artificial aunque es un tema que me apasiona. Según los papers y diferentes pruebas que se han realizado hasta la fecha, el machine learning no tiene una aplicación clara dentro del mundo del audio más allá del análisis.
7- ¿Quiénes son vuestros clientes? ¿Cómo buscáis nuevos mercados para expandiros?
Nuestros clientes son músicos, productores, DJs, ingenieros de sonido y estudios de grabación. Entre ellos están Coldplay, la BBC, la radio televisión pública de Suecia, Peter Gabriel, Greg Wells (Katy Perry, Mika, Adele)…
Siendo un nicho de mercado relativamente reducido, todo el mundo se conoce y sabe qué está disponible. El mundo musical está plagado de gente entusiasta de la tecnología y cuando sacas un producto es como sacar un juguete nuevo para que la gente se divierta, para mejorar su flujo de trabajo o para hacer que su trabajo sea mejor. El mejor marketing es un buen producto.
8- El hecho de estar ubicados cerca de Ibiza, ¿influye en vuestro estilo o relaciones con el sector de la música electrónica?
No influye, salvo en el hecho de que la gente sepa dónde trabajamos. En todos los plug-ins que puedo suelo añadir «Made in Mallorca«, y no es poca la gente que me manda mensajes diciendo «¡qué envidia!».
9- Hoy en día hay una democratización total de la producción musical, nunca ha sido tan fácil hacer tutorial online de software muy baratos….¿Una trayectoria como la de Avicii puede ser una nueva norma de cara al futuro? ¿Esta tendencia influye en vuestra forma de trabajar?
Totalmente. De hecho en YouTube puedes encontrar un tutorial hecho por el propio Avicii en el año 2012, cuando todavía no era una estrella mundialmente reconocida, en el que explica cómo ha producido una canción en FL Studio.
10- En Mallorca contamos con empresas punteras en el sector TIC y con clientes de ámbito internacional. ¿Desde fuera se percibe la isla como referente tecnológico a nivel nacional e internacional? ¿Cuáles son las ventajas e inconvenientes de estar ubicados en Artà?
Me gustaría poder decir que sí, pero de momento creo que no se percibe a Mallorca como un referente tecnológico. Yo aporto mi granito de arena en lo que puedo y siempre incluyo el nombre de Mallorca. De hecho, me gustaría hacer librerías de instrumentos típicos de Baleares.
La mayor ventaja de estar ubicado en Artá es la comodidad, es mi pueblo natal y no me gustaría moverme, estoy muy bien aquí. La gran desventaja es el aislamiento que supone el vivir en una isla, y además el estar en un pueblo a una hora de Palma es perjudicial a la hora de buscar talento para trabajar, ya que la mayoría de gente se concentra en la ciudad. Ya sabemos que una hora de coche en Mallorca es infinita.
11- ¿Qué recomendarías a un joven que quiere entrar en este sector? ¿Cuáles son las opciones de formación en Baleares, y las que recomendarías?
Tres cosas: música, matemáticas y electrónica. El gran tridente. No soy muy consciente de las opciones de formación que hay en Baleares ya que soy autodidacta.
Lo primero que haría sería instalar Reaper (gratuito) o el DAW que sea y empezar a grabar y a conocer cómo funciona este mundo.
No nos tenemos que olvidar de que la meta de un instrumento virtual o un plug-in de sonido es la música. Al final las canciones son lo más importante, así que empezaría por ahí.
12-¿Hay algúna peli que te ha inspirado últimamente en tu trabajo? ¿Por qué razón?
Sé que es muy típica pero me marcó profundamente La Red Social. Recuerdo verla en el cine y al salir ver claro que estamos en el sitio perfecto en el momento perfecto. Era hora de aprender a programar.