Título: Tiempo de Utopías
Editorial: Apache Libros
Promotor: Fundación Asimov
Año de publicación: 2021
Género: Ciencia ficción
Páginas: 227
Sobre los autores:
Óscar Eslava
Ha publicado Hermanas (Esdrújula Ediciones, 2018), novela de amor DGT-BIQ+ con un fuerte mensaje antipatriarcal, y “El futuro que hicimos (Esdrújula Ediciones, 2017), novela utópica de género ambientada en un mundo forjado por las luchas sociales y la necesidad de enfrentarse a las consecuencias de un sistema insostenible.
Osvaldo Barreto
Ha publicado «El engrama: antología de ciencia ficción tachirense» (FundaJAU, 2018), «Crónicas verdes: 36 microcuentos greenpunk» (FundaJAU, 2019), «Umbrales virulentos: antología de ciencia ficción latinoamericana», (2018) La constelación de la estrella solitaria (FundaJAÜ, 2021), El niño astronauta (Amazon, 2019). Su obra también figura en la revista digital miNatura nº 165 (España, 2018) y en la revista de estudios culturales Bordes nº 7 y 8 (Venezuela, 2014).
Isabel Llodrà Riera
Es coautora de “Visibilidad, cómo gestionar la reputación en Internet” (Gestión 2000, 2009) y de “Economía de plataformas: retos y normativa” (Atelier, 2021). Su artículo científico más relevante es “A multidimensional analysis of the information sources construct and its relevance for destination image formation” (Tourism Management, 2015), fruto de la tesis doctoral “Gestión de la imagen del destino en el contexto del turismo 2.0. Recomendaciones estratégicas para la Organización de Marketing de los Destinos (OMD). Coordina el área de sociedad digital de la Fundación BIT y promueve las vocaciones tecnológicas y la digitalización de las empresas.
Javier Font
Ha publicado sus cuentos en revistas como “Supersonic” (Nº 11 y “Pátreon de la misma”), “Windumanoth” (Nº 1) o la web “Libros Prohibidos”; también está presente en la antología “Efeméride” de la editorial Premium así como en la selección realizada por la AEFCFT para el certamen “Visiones 2021”. Ha escrito y editado dos novelas cortas: «No quedan hombres justos en Sodoma» y «Huero». Farmacéutico de profesión
Análisis:
Se trata de una recopilación de 4 relatos de ciencia ficción correspondientes a las obras ganadoras del I Premio Pragma de relato de ciencia ficción organizado por la Fundación Asimov, orientado a crear una ciencia ficción de carácter propositivo y posibilista, recuperando el pensamiento utópico .
Los cuatro relatos combinan elementos científicos y tecnológicos de la ciencia ficción clásica con una dimensión social, estableciendo un diálogo imaginativo sobre algunos problemas de dramática actualidad.
El equilibrio entre la tecnología y la política se mantiene en la mayoría de los relatos, describiendo un mundo imperfecto con sus complejidades.
“Reproducción social”. Óscar Eslava
El relato se sitúa en el año 2050. El coworking, el teletrabajo, las organizaciones horizontales, no jerarquizadas, no piramidales, la holocracia, están presentes como una forma de organizar las empresas en las que no hay directivos con autoridad sobre los demás, sino horizontalidad y círculos autoorganizados en torno a objetivos concretos.
Una serie de cooperativas están diseñando e implementando App-TAs. Se trata de una aplicación para cuantificar y valorar los trabajos no reconocidos. La aplicación genera un saldo social en función de las tareas de cuidados de los demás que se realizan. Si fuera dependiente recibiría saldo extra para que alguien realizara las tareas.
Se intenta obligar a todo el mundo a compartir tareas de reproducción social, hombres y mujeres, según su capacidad y necesidades. Por ejemplo, tareas de acompañamiento al médico genera saldo.
Pero aplicarlo no es fácil, tiene sus dificultades en un mundo capitalista y dominante y no está exento de ser visto como el «Gran Hermano» vigilando todo el tiempo.
Lleva más de tres años desarrollar esta app. No se profundiza en la tecnología para hacerla posible. ¿Lo que realmente es revolucionario es el cambio social que implica utilizar esta app para crear una economía de los cuidados desde cero. Aún así coexistirán los dos sistemas de pago: el dinero y los CBRS, correspondientes a una retribución económica y a una retribución social para cada tarea que se lleve a cabo, ajustando las contraprestaciones a diferentes factores como la edad, condición física, grado de dependencia.
Mientras en el relato se narra todo el proceso para desarrollar esta aplicación, también se relatan detalles de la vida del día a día como el uso habitual de apps de transporte con saldo de kilómetros y con el uso exclusivo de coches eléctricos. Y el uso extendido de la IAr, una especie de agente que controla los ritmos del cuerpo, la información vital, la adaptación del ambiente y la gestión del transporte. Incluso se menciona un androide doméstico, que aunque realiza algunas tareas no parece ser capaz de realizar las más necesarias.
Otras tecnologías que se mencionan son una impresora de alimentos y una especie de pegatina ID para conocer el recorrido de los alimentos, la trazabilidad.
Por otra parte, se mencionan recuperación de hábitos antiguos, ya que podían comprarlo todo a través de plataformas y usando la IAr, ir de compras se convierte en un hábito social.
Es un relato donde el feminismo está de actualidad poniendo en valor los cuidados y se fuerza un cambio fundamental en la mentalidad social
“El arquitecto verde”. Osvaldo Barreto
Se trata de un relato que persigue la sostenibilidad medioambiental y ecológica en un entorno donde el supremacismo tecnológico disputa en la regeneración orgánica la forma de salvar el mundo en un contexto de un grave problema ambiental, calentamiento global, tsunamis, aumento del nivel del mar, guerras, aumentos de población, derrame de petróleo y avaricia humana. O sea, en plena época del capitalismo depredador.
Un filántropo se ve inmerso en un diálogo entre la tecnociencia y el transhumanismo frente a lo orgánico, incluso abandonando la naturaleza. Sin embargo, apuesta por el emprendimiento con conciencia social y la cooperación para resolver problemas.
En un entorno donde el paisaje urbano frío y gris, los desiertos y la esterilidad se impone en el territorio, el proyecto Prometeus, una marca que suena a promesa, trabaja en regenerar la naturaleza con 90 km entre casas y oasis verdes a través de una eclosión.
Pero la empresa Faustika se interpone en el camino. Aunque en principio los dos emprendedores, el Arquitecto Verde, el orgánico, y Mr. Ciborg, el tecnócrata, totalmente opuestos de mentalidad parecían enemigos, durante el relato se van convirtiendo en aliados para desafiar al mal común y luchar contra el inevitable aumento del nivel del mar.
Faustika se dedica a la cibernética y en especial a desarrollar prótesis humanas. El dueño era el sr. Ciborg había perdido un brazo y una pierna y se había hecho sus propias prótesis. Además, crea tenconoespacios con luz artificial y aire acondicionado, como naves espaciales, sin espacios verdes, de formas geométricas, compite por los espacios tecnificados que parecían pensados por robots frente al espacio orgánico que promulga el Arquitecto Verde.
El relato narra muy brevemente los efectos del transhumanismo; como jóvenes que se amputaban a propósito para ponerse prótesis que les diferencian de otros grupos sociales abordando el tema de las múltiples identidades transhumanas, o como María, la mujer del Arquitecto Verde tuvo un accidente laboral por culpa de un sensor que no interpretó bien los datos y se le amputó una mano. El sr. Cíborg le regaló una prótesis que no sólo le devolvió las funciones de la mano, sino que además le aportó capacidades aumentadas que le permitían trabajar de forma mucho más rápida que un ser humano sin prótesis.
También se aborda de forma fantástica la biotecnología, en concreto en la fusión de una planta, animal y organismo cibernético. Las raíces de esta planta purifican el mar y suelos contaminados. Y será un reto para el Arquitecto Verde determinar hasta dónde pueden llegar sus funcionalidades.
Así, a lo largo del relato se va narrando la disputa entre el supremacismo tecnológico y lo orgánico, y no queda claro cuál es lo más conveniente, pero sí pueden llegar a convivir para salvar el futuro de la humanidad y del planeta.
“El movimiento nodo”. Isabel Llodrà
Se trata de un relato en el que se narra cómo se desarrolla una inteligencia artificial que facilitará los procesos de participación ciudadana en la gestión pública. Además, el sistema facilitará una visualización de la trazabilidad de decisiones políticas para poder realizar proyectos de forma más eficiente y justa.
Es la propia sociedad quien crea esa inteligencia artificial. Se organizan a través de las redes sociales que nos vigilan y en esta organización tanta importancia tiene el anonimato, como la identidad y los seudónimos. El anonimato es esencial para que el movimiento nodo no sea desactivado, aunque algunos políticos actúan bajo su propia identidad, son aquellos que apuestan por un cambio real.
Se analiza también cómo los mercados de la comunicación y los judiciales pueden intervenir en la mejora del proceso.
A lo largo del relato se mencionan muchas tecnologías aunque no se acaben de explicar todas, algunas de ellas se narra cómo se utilizan en esta historia, como sensores, actuadores, realidad virtual, realidad aumentada, impresión en 3D, robótica, internet de las cosas, drones, vehículos autónomos, asistentes personales virtuales inteligentes, blockchain, vigilancia constante por cámaras de seguridad. También se abordan temas como el envejecimiento de los cíborgs y el transhumanismo.
La historia empieza en un momento en el que la tecnocracia domina la escena digital y el capitalismo digital más salvaje la avala. Los medios de comunicación no paran de recordar que la tecnología es maligna y las fakenews están a la orden del día. Las masas están alineadas con las pantallas y con la voluntad de los algoritmos. El espacio físico es escaso y la sensación de seguridad ha invadido el anhelo de libertad.
En este contexto, una parte de la sociedad todavía es capaz de organizarse y revertir la situación para conseguir que la tecnología empiece a trabajar por el bien común. El propósito es gestionar eficientemente el espacio vital y el espacio público en un momento en que el espacio es escaso y hostil, las plataformas de alquiler turístico han encarecido la vivienda, era constante una crisis habitacional, y las infraestructuras públicas estaban en decadencia .
En un mundo dominado por las máquinas y los automatismos plantea que sólo la autorrealización puede diferenciar a los humanos de las máquinas y que si los gobiernos no contribuyen al bien de la humanidad pueden ser sustituidos por algoritmos.
Para crear un sistema de trazabilidad de toma de decisiones de forma descentralizada un problema que se aborda es cuáles son los datos necesarios para alimentarlo y quién ostenta su propiedad. Además se intenta discernir entre datos necesarios, redundantes, contradictorios, insignificantes, fake o los que aportan ruido al sistema.
Se narra toda la metodología y grupos de trabajo para desarrollar la inteligencia artificial para mejorar la toma de decisiones políticas, y en este proceso se pasa por temas tan actuales como los hackatones, los movimientos makers o la economía circular.
También plantea que la inteligencia artificial puede equivocarse en sus diagnósticos, y que si lo hace debe recompensar a las personas afectadas.
“Madre robot”. Javier Font
Este relato está relacionado al intentar cómo solucionar los problemas de despoblamiento, de los lugares abandonados. Por eso se programan robots para cuidar, alimentar y educar a hijos que son seres humanos. Es decir, un robot cría a un ser humano desde que nace hasta que muere. Se trata de un robot con rasgos humanos capaz de amar y tener miedo, incluso, amamantar.
La protagonista es una androide tan humana o más humana que los propios humanos. La robótica llegó para auxiliar a la sociedad. En este caso, el robot tiene empatía y la posibilidad de sentir piedad por el sufrimiento humano y animal.
Se plantea cómo los droides comienzan a pagar las pensiones a la gente. El relato describe cómo se crea y evoluciona un robot, pasando por la infancia y la adolescencia, para poder llegar a convertirse en la madre de un humano. Tiene sus propios inconvenientes, como los primeros humanos creados por robots fueron infelices.
En la historia aparecen algunas tecnologías futuristas como personas mayores enganchadas a emulaciones virtual de sus recuerdos para evadirse de la realidad, viviendo en condiciones infrahumanas, conectados 11 meses a una máquina y descansando uno. También aparecen drones, hologramas, droides constructores y cosechadoras robotizadas.
Las leyes de Asimov no son ajenas a la historia y se ponen en cuestión.
Llama la atención que en un mundo tan evolucionado por la robótica las viviendas para criar a un niño eran infrahumanoas, la robot tuvo que adecuarlas.
Perspectiva de género:
En los 4 relatos las mujeres son protagonistas pero desde un punto de vista distinto.
En “Reproducción social” la propia historia está construida sobre una perspectiva feminista ya que trata el tema de valorar los trabajos de los cuidados, tareas históricamente llevadas a cabo por mujeres e inmigrantes. Pero la protagonista que llegará a hacerlo posible es una mujer empoderada proveniente del mundo capitalista que por obligación, no por voluntad, ha tenido que cambiar su visión de los negocios.
En el “Arquitecto Verde” la mujer tiene un papel secundario y es la “mujer de”, aunque dentro de la historia tenga un papel funcional, pero no de liderazgo.
En el «Movimiento nodo» la que inicia el movimiento y narra toda la historia es una mujer, pero anónima, huye de cualquier protagonismo, y su única voluntad es que el proyecto lo ejecuten los demás para lograr un bien común. En la historia también aparecen mujeres que han sido educadas por ser independientes y resolver sus propios problemas.
En “Madre robot” el robot es una mujer y hace el papel de criadora. Por lo que se narra adopta un cuerpo de mujer funcional, un humanoide, que es capaz de despertar instintos sexuales de algún hombre.
En todos los relatos todos los hombres son estereotipados.
Conclusiones:
Los 4 relatos son verosímiles porque abordan problemas sociales reales en mundos imperfectos y complejos y la tecnología, sirve para aportar soluciones que pueden ser más o menos acertadas. En todos los casos, impacta sobre la sociedad actual y provoca cambios de pensamiento, organización y filosóficos, que no siempre son bien aceptados o adoptados.
Aunque la tecnología descrita en la mayoría de los casos es factible y está basada en la evolución científica, así como se implanta en la sociedad es lo que realmente es ficción.
Al menos se ha logrado narrar utopías aunque siempre queda alguna escena distópica que nos recuerda que, aunque la tecnología es neutral su uso y las consecuencias sociales de su implantación no lo son.
En este vídeo se explica cómo surgió el concurso, la visión del jurado y de los autores desde el punto de vista de los planteamientos y los nacimientos de sus obras.
Preguntas sobre el debate:
- ¿Se deben valorar y compensar las tareas de cuidados familiares, así como las industriales o de servicios? ¿Con la misma moneda? ¿Con ponderaciones?
- ¿Se debe aceptar la vigilancia constante para la monitorización constante de las acciones de las personas humanas, sea ciudadanía, políticos o funcionariado? ¿Cuáles sí y cuáles no? ¿Unos pueden elegir y otros no? ¿Por qué?
- ¿Puede la tecnología frenar o revertir el cambio climático? ¿Puede regenerar el paisaje?
- ¿Hasta qué punto los algoritmos pueden sustituir a las decisiones humanas?
- ¿Qué ocurre si una inteligencia artificial se equivoca? ¿Quién sería el responsable?
- ¿Cuáles son los datos que no aportan valor a los sistemas de decisiones?
- ¿Debe utilizarse la tecnología para aumentar las capacidades humanas o para cambiar las identidades?
- ¿Puede criar y educar un robot a un ser humano?
- ¿Será capaz la sociedad de organizarse y hacer un buen uso de la tecnología?
- ¿Cómo envejecen los robots, los cíborgs y dónde van a parar todos los residuos tecnológicos?